El más terrible de los villanos posibles

Nota Previa del Autor

Hay una justificación para ese nombre tan innecesariamente leibniziano. Pero antes un consejo gratuito: si usted, mi querido y siempre respetadísimo lector, es de los que se queja por lo largo que se escribe aquí, le aconsejo que siga hasta que logre superar su lúgubre complejo contemporáneo de pereza virtual crónica: como hace poco escuché: “pensar es gratis, aproveche”. En este espacio he de decir que tampoco cobramos.


Viendo un documental (más bien pobre) sobre los villanos más villanos en el cine, se me ocurrió hacer mi propia top list de los malos más pútridos del mundo de la ficción.
Uno de mis favoritos siempre ha sido “El Doctor (Dr. Phillip Channard) de Hellraiser II, a quien le debemos una de las frases más oscuras, sutiles y depravadas del cine de terror (se las dejo de tarea).
Pero, había algo que no me gustaba. Mi querido Channard, lamentablemente, no podía estar en la lista top. Había que ser sobretodo más inteligente, menos obsesionado (siempre he pensado que las obsesiones son una ignorancia mal cuidada). Había que ser en últimas menos codicioso para que yo le levantara un altar pagano al peor de los villanos posibles. Considerando entonces que no debía empobrecer mis energías en tan noble y reflexiva tarea, me coloqué concienzudamente reglas para la dirección de mi voluntad.
Entre las más importantes y obvias era que tal villano podría ser animal, monstruo o cualquier tipo de entidad que pudiera llamársele “inteligente” (el organismo biológico de “The Thing” por ejemplo se encuentra en mi lista. El Arquitecto de "Matrix" no podía faltar). de esta manera fui configurando mi lista de villanos. Faltaba por considerar un problema, y era el de cual de todos esos villanos debería ser el rey, el peor de los villanos posibles.
Recordé entonces al Joker de Heath Ledger. Este personaje se encuentra a un nivel muy superior al de los demás: sólo hay un adjetivo para describirlo: es el villano “nietzscheano” por excelencia. Sobre ese tema podría escribir una entrada entera, pero ahora (tristemente) no me queda de otra que acudir a la inteligencia del preciado lector para que reflexione sobre las palabras y actitudes del Joker en la (salvo por Ledger) fastidiosa película, para que pueda reconocer las razones por las cuales digo lo que digo. Lo cierto es que, al parecer, el Joker ganaría la carrera por mi corazón.
Pero después recordé algo de mi absoluta niñez, una película maravillosa con la que me asombré en mis años de infancia, y por razones que explicaré más adelante, mi juicio sobre el peor de los villanos cambió de manera sustancial. He de decir que hasta ese momento el villano de esa película ni siquiera estaba en la lista: si ustedes desean saber cual es el peor de los villanos posibles véanse una serie de dos películas llamadas Gremlins (1984-1990). Para resumir, los “Gremlins” son en realidad Mogwais (espíritus malignos). En un primer momento son criaturitas muy bellas peluditas (estilo mamífero promedio). Pero esas criaturitas de dios ocultan cosas terribles. Para dar un ejemplo, si se mojan, así sea una gota, de sus espaldas brotan pelotitas que se transforman rápidamente en otros Mogwais mamíferos-peluditos. ¿Qué tipo de ser perverso se reproduce de esta manera?... El otro problema es aún más grave: si llegan a comer después de la media noche, se metamorfosean en criaturas espantosas babosas y llenas de escamas que aterrorizan sin parar. Si cae en una fuente de agua lo suficientemente grande, uno sólo de estos Mogwais transformados, puede dar fruto a una horda de engendros reptilianos del demonio con un sentido del humor lo más gangrenoso imaginable que en horas podrían acabar con un pueblo cristiano promedio. No es algo con lo que se juega, pero si para algo sirve el cine es para mostrar lo morrongo que puede llegar a ser el mamífero humano cuando se le suelta a su propio arbitrio. Así que no tenemos por qué asombrarnos cuando en la película mencionada vemos una banda irracional de estos nobles seres apoderándose de un lujoso edificio neoyorquino y reduciéndolo al caos.

¿Por qué un villano de una película con evidentes rasgos cómicos desplaza al Dr. Channard y al Joker? Veamos: Los Gremlins no pretenden ser villanos, no intentan hacer daño a nadie ni a nada. Un Gremlin no tiene proyecto salvo el de existir. Su conducta es la de un niño inocente que destruye sin parar porque esa es su naturaleza. El Gremlin no es malo en el estricto sentido del término, solo desea ser. No desea el caos, él es caos. En eso ellos se encuentran en una categoría más allá de cualquier Joker. El Joker de la película afirma no ser un conspirador, pero de hecho sí lo es, desea el caos y desea mostrarles a los habitantes de Ciudad Gótica que su vida racional es una mentira, que debajo de ella hay desorden y lucha de fuerzas. Ledger en la película es un despreciable moralista más. Pero, ese tipo de aspiraciones están por fuera completamente de la mente de un Gremlin, el Gremlin no desea, o más bien, su único deseo es desear. Inconsciente de sus desastres sólo le da rienda suelta a lo que él representa, un Gremlin es la catástrofe hecha inercia. Ellos no buscan torpedear un orden establecido, sólo encuentran el mundo allí, disponible para ellos, a su servicio tal cual es. Por eso es que la figura del Gremlin se muestra en la película con ese terrorífico humor anárquico que los caracteriza. No ha habido en la historia del cine un villano más terrible, más mundano, más esperanzador. Desearía vivir en un mundo donde tales seres existan, yo mismo desearía ser uno.


Desde este punto de vista el verdadero malparidito de la película es el tal Gizmo. En contra de su raza esta del lado del orden y los buenos modales. Opuesto a su naturaleza es un Judas mamífero que vende su raza por migajas. Un Pocahontas del mundo de los monstruos. Si lo ven por allí no duden en aplastar con un pie al hijo de... 




Grandpa Fred: [interviewing Brain Gremlin] Creature what is it that you want?
Brain Gremlin: Fred, what we want is, I think, what everyone wants, and what you and your viewers have: civilization.
Grandpa Fred: Yes, but what sort of civilization are you speaking of?
Brain Gremlin: The niceties, Fred. The fine points: diplomacy, compassion, standards, manners, tradition... that's what we're reaching toward. Oh, we may stumble along the way, but civilization, yes. The Geneva Convention, chamber music, Susan Sontag. Everything your society has worked so hard to accomplish over the centuries, that's what we aspire to; we want to be civilized.
[a Gremlin with a beanie cap acts goofy next to Brain]
Brain Gremlin: You take a look at this fellow here.
[Brain shoots the Gremlin in the head. The Gremlins in the bar laugh]
Brain Gremlin: Now, was that civilized? No, clearly not. Fun, but in no sense civilized. Now, bear in mind, none of us has been in New York before. There are the Broadway shows - we'll have to find out how to get tickets. There's also a lot of street crime, but I believe we can watch that for free. We want the essentials. Dinettes. Complete bedroom groups. Convenient credit, even though we've been turned down in the past.