Oh hermanos… Quiero compartir una experiencia que tuve cuando traté de comprender el significado del término “Política” y todos sus macarrónicos vástagos derivados…
Me propuse una seria búsqueda intelectual, hermanos, alrededor de qué significaba "política". Escudriñé en las Ágoras griegas olorosas a ajo mediterráneo aquel significado agotador. Recorrí las inmundas calles de la podrida Francia post monsieur Guillotin buscando la encarnación de las insanas ideas Avantgarde de Rousseau y Montesquieu. Salté de las tan desesperadas como amargadas letras de Arendt a los mamotretos metafóricos de Habermas buscando una definición, un concepto, una idea, un pedacito de algo convincente, una uñita de redención. Penetré sin esperanza en el utilitarismo y en las flojeras desinfladas y tautológicas foucaultianas. Me asombré con las inocentadas de Hobbes y con las condicionadas pendejadas del marxismo (digo condicionadas porque es sabido entre los filósofos que para entender adecuadamente a Marx hay que leerlo con hambre. Obviamente nadie lo dice, es un saber de esotérico, para iniciados, por decirlo de alguna manera (al hacerlo público puedo meterme en problemas). Es fácil, de hecho, saber cuando alguien se prepara para un seminario universitario sobre el pensamiento de Marx, pues uno nota a la persona de un día para otro desgreñada, sin maquillaje, flaca y con ojeras (no hay gordinflones marxistas, el vocablo es una contradicción en los términos)).
Después de todos esos recorridos mentales (porque no es que crean que me leí en efecto toda esa enredadera) descubrí hermanos que todo estaba bien y mal al mismo tiempo hermanos porque todos los conceptos eran diferentes y al parecer nada se podía hacer para reconciliarlos. Sentía en mi espíritu todas esas ideas salpicar como gotitas miserables de agua fría en un horror de aceite hirviendo.
Así que tuve la intuición de hacer mi propia definición de "Política", oh hermanos. Una definición que recogiera lo más importante de cada definición encontrada y pudiera ser lo más general y amplia posible como para integrarlas a todas. Pero, sobre todo, que pudiera dar cuenta del fenómeno antropológico general que llamamos con desgracia "Política".
Creo que hoy, regocíjate lector mi hermano, al fin, lo he logrado. La definición universal general de "Política". Allí va (y no esperes un chiste idiota o una ironía pseudointelectual, hermano lector, porque esto va en serio): ¿Que es la Política?... “La política es todo conjunto de discursos y acciones humanas que tiene por fin evitar que las personas se saquen masivamente las tripas entre sí... y cuando tal cosa ocurre poder por lo menos justificarlo y que no lo jodan a uno por el asunto”.
Oh, hermanos, la sabiduría política de occidente en esa compleja oración resumida.
De aquí es posible también extraer una definición del término “moral” (que bastantes Mandrágoras, Cicutas, Tetrahidrocannabinoles, Masturbaciones y Valiums les ha costado a filósofos inmorales imaginar), pero para hacerlo tendría que extenderme, Oh hermanos, y no estoy de ganas ahora. Hay que dejar rumiar al burrito mental que todos llevamos dentro. (... Además si escribo largo después no me leen que pendejada los lectores).
PD: Que se jodan, se seguirá escribiendo largo (y en voz pasiva). Faltaba más, ya verán... Ahorita no más que me sienta mejor del estómago.
Siempre he pensado que la política nació el día en que uno (o una, que tengo mis fundadas sospechas), no demasiado grandón pero sí más listo que su adversario, tiró el palo con el que se defendía y soltó un insulto que dejó al otro rascándose el coco.
ResponderEliminarY así continuamos: unos haciendo uso de la fuerza y otros probando a ver si con la palabra nos llevamos el gato al agua...
hermano...te extraño. Soy tu hermana espiritual, no? alguna vez lo dijimos.
ResponderEliminarMe preocupa tu malestar estomacal...crees acaso que te voy a cobrar la consulta o q, eh?
saludos a mis sobrinos los gatos, abrazote a Lo y un beso enorme en tu calva!
Espero verte pronto.
OLGA
Ahora como en las comisarías de policía, dentro del partido político, uno hace de bueno, comprensivo, amable y otro es el malo, el perverso, el que maneja la fuerza bruta.
ResponderEliminarAl final el ciudadano es convencido debidamente.
Benjuí:
ResponderEliminarMe encanta tu acertada reflexión sobre el nacimiento de la política.
Lo único que no veo es la diferencia entre los que hacen uso de la fuerza y los otros.
Señor Azpeitia:
En efecto, como en las pelis... Sólo que la realidad es mucho más graciosa.
Mi amada hermana, no lo digas es pasado que me deprimo.
Pasa por la u, pasa por la u, pasa por la u. Además me debes una visita... Sabes que puedes llegar acompañada.
Aun no he tenido tiempo para leer con detenimiento tus blogs, pero lo poquito que he visto me encanta!!!
ResponderEliminarIré poco a poco poniendome al día.
Saludines!!!
Oh, la política. Ese gigantesco lodazal... me recuerda a las conspiraciones de pequeños simios revolucionarios para asesinar a su líder por antipático. National Geographic Vs. el Canal del Congreso.
ResponderEliminar¿Quién ganará el premio de documental sobre la vida política? Mmh...
Evitar destripamientos masivos...claro, y aprovechar para sacar una platica extra (o frutica extra, depende de la especie) por los servicios prestados.
Un beso. Adiós.
Posdata: Más te vale no resumir tus escritos para hacerlos más masticables... no me conformaría.
No se si la llegada a la tan ansiada definición es lo mejor del texto o, por el contrario, el camino con sus múltiples y personales versiones teóricas es lo que más he disfrutado. En todo caso, se deja leer y disfrutar. Estaba suave el escrito, sospechaba yo que andabas con el estómago mal. Un saludo, Alicia
ResponderEliminar¿Cómo que no hay diferencia?
ResponderEliminarSi tú lo has dicho: quien elige la palabra deja de sacarle las tripas al adversario.
Es un comienzo, hombre, no seas impaciente. En tres o cuatro mil años la cosa habrá evolucionado.
Pura paja, tu blog habacuc y ustedes
ResponderEliminarEso es lo que yo digo: pura paja. Pero nadie me hace caso.
ResponderEliminarMi querida Benjui, el asunto es que muchas veces palabra es utilizada como precisamente se sugiere en la definición, para justificar el sacarle las tripas a los otros...
Pero tal vez el que no ve las cosas como son soy yo....
La compeljidad es lo de hoy; por eso puede ser bueno y malo.
ResponderEliminarTe recomiendo: "EL Quark y el Jaguar"